El ajo es un potente antibiótico natural. Rico en compuestos como la alicina, puede ayudar a reforzar el sistema inmunológico y combatir enfermedades. Añadir ajo a tus comidas puede no solo beneficiarte a nivel de salud, sino también mejorar el sabor de tus platillos.
4. Yogur
Los probióticos presentes en el yogur pueden ayudar a equilibrar la flora intestinal, lo que es esencial para una buena salud inmunológica. Opta por yogures que contengan cultivos activos y evita los que tienen azúcares añadidos.
5. Plátanos
Fáciles de digerir y ricos en potasio, los plátanos son ideales para quienes tienen malestar estomacal o diarrea. Este alimento ayuda a reponer los electrolitos perdidos y proporciona energía sin causar irritación estomacal.
6. Miel
La miel es un excelente remedio natural para el dolor de garganta y la tos. Tiene propiedades antimicrobianas y puede ayudar a aliviar la inflamación. Mezcla una cucharada de miel en tu té tibio para disfrutar de sus beneficios calmantes.