Esta combinación también puede favorecer la digestión. La miel es un prebiótico natural, lo que significa que nutre las bacterias beneficiosas que viven en los intestinos, cruciales para la digestión y la buena salud. La canela, por otro lado, ayuda a reducir la inflamación y puede aliviar la indigestión, la hinchazón y los gases. Tomar una cucharada de miel con una pizca de canela antes de las comidas copiosas puede ayudar a controlar las molestias digestivas.
3. Favorece la Pérdida de Peso
Incorporar miel y canela a una dieta para bajar de peso puede ser beneficioso. La miel es un sustituto más saludable del azúcar y puede ayudar a controlar la ingesta calórica, mientras que la canela es conocida por acelerar el metabolismo. Consumidas juntas, pueden ayudar a regular los niveles de azúcar en sangre y reducir los antojos, lo que podría contribuir a la pérdida de peso si se combinan con una dieta equilibrada y ejercicio regular.
4. Promueve una Piel Sana
Tanto la miel como la canela poseen propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y antibacterianas, lo que las hace excelentes para el cuidado de la piel. La miel es un hidratante natural, ideal para la piel seca, y la canela puede ayudar a mejorar el flujo sanguíneo a la superficie de la piel, dando como resultado una tez hidratada, más suave y uniforme. Una mascarilla facial de miel y canela puede reducir el acné, las cicatrices y mejorar la hidratación de la piel.
5. Ayuda a Regular los Niveles de Azúcar en Sangre