Los accidentes cerebrovasculares, también conocidos como ictus, son emergencias médicas críticas que pueden afectar a cualquier persona, aunque son más comunes en la población de mayor edad. En este grupo de edad, un miniaccidente cerebrovascular, también llamado accidente isquémico transitorio (AIT), suele presentarse con síntomas temporales, pero no debe ignorarse. Detectar estos signos a tiempo puede ser crucial para la salud a largo plazo de una persona. Aquí hay cinco síntomas clave que pueden indicar un miniaccidente cerebrovascular en personas mayores.
1. Pérdida repentina de fuerza o sensibilidad en una parte del cuerpo
Uno de los síntomas más comunes de un miniaccidente cerebrovascular es la pérdida repentina de fuerza o sensibilidad en un lado del cuerpo. Esto puede manifestarse como debilidad en una pierna, un brazo o incluso la cara. La persona puede notar que no puede levantar un brazo o que su sonrisa parece asimétrica. Este tipo de debilidad es temporal, pero es una clara señal de que algo está sucediendo. Es fundamental que los cuidadores y familiares estén atentos a estos cambios y busquen atención médica inmediata.