Al lavarte e hidratarte la cara por la mañana y antes de acostarte cada noche, es posible que no siempre incluyas el cuello, el pecho y el escote. Si descuidas la limpieza, hidratación y nutrición de estas zonas —así como de las mejillas, la frente, la barbilla, la nariz, etc.—, los efectos negativos se acumulan con el tiempo.
3. Dormir de lado
Quizás hayas oído que dormir de lado (lo que hace que la cara y el cuello queden presionados contra la almohada) puede contribuir a la aparición de arrugas faciales. Es cierto, pero también puede favorecer la aparición de líneas de expresión en otras zonas: dormir de lado o en posición fetal favorece la compresión de la piel del pecho, lo que puede causar arrugas entre los senos y justo por encima de ellos.
4. Ropa restrictiva
Los sujetadores deportivos, los trajes de baño, las camisetas sin mangas y las blusas ajustadas pueden comprimir los senos y la piel circundante. Si bien puedes sentirte bien sujeta durante el entrenamiento o en la playa, recuerda que, al usarla durante horas, la ropa demasiado ajustada puede contribuir a la aparición de arrugas.
5. Fumar arruga el escote y otras zonas
Fumar no solo causa líneas de expresión y arrugas en el rostro; también puede ocurrir en el cuello y el pecho. Esto se debe a que la nicotina contrae los vasos sanguíneos de las capas más externas de la piel, lo que dificulta el flujo sanguíneo y priva a la piel de oxígeno y nutrientes importantes.