No necesitas vivir con miedo a que llegue la noche. Aquí tienes estrategias comprobadas que puedes aplicar desde ya:
🧴 1. Hidrátate bien todo el día
Tomar agua regularmente mantiene el equilibrio de electrolitos. Añade una pizca de sal del Himalaya o unas gotas de limón para mayor absorción. 🍋
🥬 2. Aumenta tu consumo de minerales
Incluye en tu dieta alimentos ricos en potasio (banano, aguacate), magnesio (espinaca, almendras) y calcio (yogur, brócoli). Estos minerales relajan los músculos y previenen calambres. 🥗
🧘 3. Estiramientos antes de dormir
Dedica 5 minutos cada noche a estirar suavemente tus piernas. Esto reduce la tensión muscular acumulada durante el día. Un simple estiramiento de pantorrillas puede hacer maravillas. 🧎♀️
🧼 4. Masajes con aceites esenciales
Frota aceite de lavanda o menta sobre las piernas antes de acostarte. Además de relajar, mejora la circulación. Un masaje nocturno ayuda a evitar espasmos. 🌺🛀
🧦 5. Usa ropa cómoda y evita calcetas apretadas
 
					