La raíz de loto contiene mucha fibra (1,2 gramos por cada 100 gramos) y proteínas. Estos nutrientes pueden unirse al colato, el colesterol y los triglicéridos en el cuerpo para reducir la absorción de lípidos. Sin embargo, la raíz de loto también tiene un contenido relativamente alto de almidón, por lo que no se debe consumir en exceso. Si la consumes en el desayuno, come despacio y mastica bien.
4. Maíz
El maíz también es rico en fibra, con 2,9 gramos por cada 100 gramos. Además, tiene un alto contenido de magnesio, que puede acelerar la motilidad intestinal y favorecer la eliminación de desechos. Por lo tanto, ayuda a prevenir el cáncer colorrectal.
Sin embargo, el Dr. Xu advierte que el maíz se enmohece con facilidad, por lo que solo debe comprarse la cantidad que se vaya a consumir. Si el maíz se enmohece, deséchelo inmediatamente, ya que los alimentos enmohecidos pueden producir aflatoxinas cancerígenas, que aumentan el riesgo de cáncer de hígado y otras enfermedades tras su consumo.