-
Remojo:
Coloca las semillas en un recipiente con suficiente agua para cubrirlas. Déjalas en remojo durante toda la noche (mínimo 8 horas) para eliminar impurezas e inhibidores enzimáticos. -
Lavado:
Al día siguiente, escurre y enjuaga bien las semillas bajo el grifo para eliminar residuos. -
Licuado:
Coloca las semillas remojadas en la licuadora, agrega el litro de agua filtrada y licúa por 2 a 3 minutos hasta que la mezcla sea homogénea. -
Colado:
Cuela la mezcla usando una bolsa para leches vegetales, tela de algodón o colador de malla fina. Aprieta bien para extraer todo el líquido posible. -
Endulzar y aromatizar (opcional):
Puedes añadir miel, stevia o una pizca de vainilla o canela si deseas mejorar el sabor. -
Refrigeración:
Guarda la leche en un frasco de vidrio con tapa en el refrigerador. Se conserva bien durante 3 a 4 días.
Beneficios de la Leche de Alpiste
Gracias a su composición rica en enzimas, proteínas vegetales, antioxidantes y minerales, la leche de alpiste ofrece múltiples beneficios para el organismo: