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Acelera el metabolismo.
El agua tibia activa los intestinos y facilita una mejor absorción de nutrientes durante el día. -
Elimina toxinas.
La sal marina actúa como un desintoxicante suave y el limón tiene propiedades antioxidantes. -
Fortalece el sistema inmunológico.
El jugo de limón es rico en vitamina C, y una hidratación adecuada mantiene activa la linfa, que combate los virus. -
Mejora la función hepática.
El limón estimula la producción de bilis y la sal equilibra los electrolitos.
🔻 Cómo realizar este ritual correctamente