Consejos:
-
Si las hornallas tienen grasa muy adherida, podés calentar levemente la mezcla antes de aplicarla. El calor activa aún más sus propiedades.
-
Este truco también sirve para limpiar la base de las ollas, las tapas del horno o cualquier superficie de acero inoxidable con suciedad acumulada.
-
Usá guantes si tenés la piel sensible, ya que el limón puede resecar un poco las manos con el uso prolongado.

-
Repetí este proceso una vez por semana para mantener las hornallas brillantes y sin olores desagradables.
-
Evitá usar este método sobre superficies esmaltadas de color, ya que el ácido puede manchar si se deja actuar demasiado tiempo.
Con este truco sencillo, vas a poder mantener tus hornallas relucientes, sin esfuerzo y sin recurrir a químicos agresivos.

¡Una solución práctica, efectiva y al alcance de todos!