También puedes forrar paredes internas del congelador con papel de aluminio para reflejar el frío y ayudar a mantener la temperatura más estable (aunque esto es más útil en congeladores antiguos).
En resumen:
El papel de aluminio puede ser tu nuevo aliado en el congelador: práctico, económico y eficaz. ¡Un truco simple que hace la diferencia en tu cocina!