En otra cacerola, calienta la crema espesa sin que llegue a hervir. Retira del fuego y añade el chocolate troceado y las dos cucharadas de azúcar. Remueve bien hasta que el chocolate se haya derretido por completo y la mezcla esté brillante y sedosa. Deja enfriar a temperatura ambiente.
Rellenar los profiteroles
Una vez que los profiteroles estén fríos, córtalos por la mitad con cuidado. Rellena la mitad de ellos con la crema pastelera usando una manga pastelera o cuchara. Los otros, rellénalos con la crema de chocolate. Puedes cubrirlos con un poco de azúcar glas, más chocolate derretido por encima o simplemente dejarlos tal cual.
Consejos para que te salgan perfectos
Para que los profiteroles no se desinflen, es muy importante hornearlos el tiempo suficiente hasta que estén bien dorados y secos por dentro. Nunca abras el horno durante la cocción. Además, asegúrate de dejar enfriar completamente la masa y los rellenos antes de armar los pasteles. Si deseas guardarlos, lo ideal es mantener la masa horneada en un recipiente hermético y rellenarlos justo antes de servir para que se mantengan crujientes.
Variaciones e ideas
Puedes usar otros rellenos como crema chantilly, mousse de frutilla, dulce de leche o incluso una mezcla de queso crema y frutas. Los profiteroles también se pueden transformar en una torre de croquembouche para celebraciones especiales, o presentarlos como postre individual con un baño de chocolate caliente encima.
Conclusión
Estos profiteroles con dos rellenos son la combinación perfecta entre técnica y sabor. Aunque puedan parecer sofisticados, en realidad son muy fáciles de preparar si sigues cada paso con atención. La masa choux es versátil y ligera, y los rellenos de crema pastelera y chocolate se complementan a la perfección.
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