3. Pies
. Quizás el factor más sorprendente sea el olor de pies. Si los desechos no son procesados por el hígado, se excretan a través de las glándulas sudoríparas de los pies, lo que resulta en un olor persistente incluso después del lavado regular.
Estos cambios sutiles suelen ignorarse como molestias menores. Sin embargo, en algunos casos, pueden ser una señal de alerta del organismo sobre problemas hepáticos graves.
Por qué el hígado es más importante de lo que creemos.
El hígado es un órgano poderoso responsable de más de 500 funciones vitales. Filtra toxinas, produce bilis para la digestión, regula las hormonas, procesa nutrientes y fortalece el sistema inmunitario.
Cuando el hígado empieza a fallar, todo el cuerpo sufre. Los síntomas pueden aparecer gradualmente: fatiga, pérdida de apetito, orina oscura, coloración amarillenta de la piel o hinchazón abdominal. En otros casos, como el de esta profesora, los síntomas iniciales pueden ser mucho más sutiles, como un olor desagradable o problemas digestivos leves.
Desafortunadamente, la enfermedad suele estar ya avanzada cuando aparecen los síntomas del cáncer de hígado. A diferencia de otras enfermedades que causan dolor intenso o cambios bruscos, la enfermedad hepática suele ser asintomática. Por eso es tan importante realizar pruebas y exámenes de función hepática con regularidad, especialmente en adultos mayores que ya podrían tener un mayor riesgo.
