-
Siempre diluye el aceite esencial con un aceite base antes de aplicarlo.
-
No ingieras aceite esencial puro sin la supervisión de un profesional.
-
Si tomas medicamentos para la presión o anticoagulantes, consulta a tu médico antes de usarlo.
Conclusión
Aunque el 95% de los mayores no lo sepan, el aceite de romero es mucho más que un simple condimento. Es un remedio natural y ancestral que ayuda a aliviar el dolor, mejorar la circulación y revitalizar cuerpo y mente. Los viejos doctores confiaban en él, y ahora tú también puedes hacerlo.
Con solo dos gotas al día, el aceite de romero puede marcar una diferencia real en tu movilidad, vitalidad y bienestar general.