1. Dormir boca arriba con las piernas extendidas (Incorrecto)
Cuando dormimos boca arriba con las piernas extendidas, la presión se acumula en la zona lumbar, lo que puede afectar la curva natural de la columna y causar dolor. Este tipo de postura puede resultar en incomodidad durante el día e incluso en trastornos del sueño.
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2. Dormir boca arriba con soporte bajo las rodillas (Correcto)
Colocar un soporte suave debajo de las rodillas ayuda a mantener la curva natural de la columna vertebral, lo que reduce la presión sobre la zona lumbar. Esta posición es especialmente beneficiosa para aquellos que sufren de dolores de espalda, ya que permite que los músculos se relajen y se recuperen correctamente durante la noche.
3. Dormir de lado con postura inadecuada (Incorrecto)
Dormir de lado puede ser beneficioso, pero si la cabeza y el cuello no están bien alineados, puede provocar dolor en la parte superior de la espalda y el cuello. Esta posición puede causar tensión muscular y rigidez al despertar, afectando nuestra disposición durante el día.
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4. Dormir de lado con soporte adecuado (Correcto)
Usar una almohada adecuada que soporte el cuello y mantener una almohada entre las piernas ayuda a mantener la alineación de la columna. Esta es, en general, una de las posiciones más recomendadas por los expertos en salud, ya que proporciona soporte y alivia la presión en las articulaciones.
Consejos para mejorar la higiene del sueño
