Esta fruta contiene vitaminas A, C, E, K y B6; estas vitaminas no solo ayudan a nutrir la piel; sino que también ayudan a reducir el tamaño de los poros. Además, contienen ácido salicílico; el cual es un ingrediente que se encuentra en casi todos los tratamientos de acné.
1. Frotar tomate
Solo debes de cortar una rodaja y fritarlo en las áreas de tu cara que se encuentran afectadas por el acné. Luego, procede a masajear tu pelo con el jugo que esta fruta dejó sobre tu piel. Después de esto, procede a enjaguar tu piel.
Esta técnica puede que no te de grandes resultados; pero te ayudará a nutrir tu piel.
2. Máscara facial de tomate