Los anturios necesitan suficiente luz, al menos 10 horas al día. La ubicación ideal para la maceta es una ventana orientada al este o al oeste, donde la planta reciba luz de la mañana o de la tarde. La ventana orientada al norte no es adecuada para la floración, pero sí para el crecimiento de un arbusto frondoso.
El éxito del cultivo del anturio depende en gran medida del tamaño de la maceta. En una maceta demasiado grande, la planta extenderá demasiado su sistema radicular, lo que afectará la floración y el tamaño de las hojas. Si las hojas comienzan a marchitarse, podría ser una señal de que es necesario replantar debido a la pudrición de las raíces.
Selección del sustrato
Al ser epífita, el anturio crece de forma natural sobre otras plantas, por lo que no necesita tierra negra y densa. El sustrato debe ser soluble, secarse rápidamente y conservar la humedad. La opción ideal es una mezcla de tierra y corteza de pino.
Vinagreta
El anturio requiere una fertilización cuidadosa, ya que es una epífita y no requiere mucho fertilizante. Se recomienda reducir a la mitad la dosis recomendada de fertilizante, comprando productos del mismo fabricante que la tierra.
Pulverización